El Arkea Samsic acumula una serie de gestos, hacia Nairo Quintana, que muestran una conexión especial y necesaria con el colombiano, quien ha visto el respeto como uno de los valores principales del equipo.
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Las dudas se van resolviendo. Nairo ha rendido como no lo hacía hace tiempos, en su nuevo equipo. Sin embargo, faltan las pruebas más complicadas, las más duras, las carreras de tres semanas… el Tour de Francia.
No hay que demeritar lo hecho en un inicio. De hecho, es todo lo contrario, las victorias en el Tour de los Alpes Martítimos y en el Tour de la Provence, más la etapa reina de cada una de ellas y de la París Niza, han devuelto la confianza.
El centro del cambio, el colombiano ya lo ha dicho, en el Movistar ya no se sentía bien. Ya no era como al principio y de manera normal, el ciclo se fue acabando porque ya no había más allí.
De parte y parte se agradecieron y permanecen los buenos momentos. Ahora, en el Arkea ha encontrado una sensación de felicidad que le permite rendir. Pero, además de esto, se ha encontrado con algo que también da confianza: respeto.
Nairo Quintana y los gestos de respeto del Arkea Samsic
«Para mí es muy importante sentirme como en familia», dice Nairo. Es un aliciente tener a su hermano Dayer y a su compañero y tal vez mejor amigo, Winner Anacona, junto a él.
Sin embargo, gran parte del rendimiento de Nairo, también se debe al respeto que el equipo, todo, ha impartido en él. Y podemos contabilizar esos gestos especiales, que ha tenido el Arkea con el de Cómbita.
El primero, fue el hecho de tomar en cuenta sus recomendaciones, para traer a los ciclistas que debían estar a su lado, además de quienes ya estaban. Lo escuchan.
El que sea el líder del equipo y que tenga el respaldo que se vio en las carreras, hasta ahora disputadas, confiesan que el papel con Nairo es claro, él es la prioridad para ganar generales, que es el objetivo magno de Hubert.
Él, Emmanuel, contradice a Unzué. Para Hubert, Nairo aún puede ganar una grande. Aún cuando estaba en el Movistar, a finales de 2019, se cruzaba con gente del Arkea y ante los rumores que el colombiano estaría allí, le demostraban alegría de tenerlo allí.
Las personas del stuff, han reconocido en él, un gran corredor y un gran ser humano. Aseguran estar junto a un gran campeón, una gran personas y un profesional de altura.
Y el más reciente, el de Warren Barguil, quien no se embarcó en polémicas y dijo que «su Tour perfecto sería, una victoria de etapa para él y un podio para el colombiano», lo que también habla de un respeto que otorga confianza.
Con las cosas claras, el camino se le despeja a Nairo, para llegar cargado al Tour de Francia, pues hay respeto, hay alegría y hay confianza.
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