Daniel Felipe Martínez atacó desde lejos, quería ser protagonista y lo estaba consiguiendo. La etapa 4 del Tour de Romandía era ideal para protagonizar una fuga y el de Soacha lo hizo y empezó a reducri tiempo con el líder, Primoz Roglic.
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La cuestión es que Dani Martínez iniciaba la etapa con 1 minuto 26 segundos de distancia con el líder de la competencia, por lo que intentar una escapada, no era una locura, no había nada que perder. La etapa fue recortada por motivos climáticos y se redujo a 107 km, dejando solo un puerto de montaña.
Esto motivó a Martínez y desde el inicio salió adelante. La estrategia marcaba aguantar y sacar el mayor tiempo posible a Primoz Roglic y mirar con esas diferencias, la contrarreloj de la etapa 5, aunque era muy prematura decirlo.
La escalada final, dejó adelante a Daniel Felipe Martínez y a Alexis Gougeard quienes tenían que ir solos hacia arriba, el clima y la dureza del terreno hicieron que el pelotón redujera un tiempo de dos minutos de distancia a tan solo 5 segundos.
Infortunadamente el Ineos, que tiraba del pelotón principal, logró capturar a Martínez y todo se redujo a los últimos kilómetros. Gaudú atacó y trató de irse adelante e infortunadamente no había colombianos en la parte delantera de la carrera, que se partió en el ascenso a la montaña.
Y el increíble ataque de Roglic dejó a muchos sorprendidos. Quería dejar sentenciada la general y aunque Thomas, del Ineos, intentó detenerlo, no pudo evitar que el esloveno ganara y dejara casi definido el Tour de Romandía.
Carlos Betancur llegó un poco más retrasado, pero logró firmar una buena carrera, tratando de mantenerse adelante. Así fue el final de la etapa:
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