Alejandro Valverde no quería quedarse en el auto del Movistar Team, quería experimentar lo que los ciclistas iba a vivir en el Alto del Vino, un puerto aunque duro, seductor para los que aman la bicicleta y se ponen retos, el español lo hizo y la gente enloqueció.
El Bala está retirado, pero tiene las piernas de un profesional más, su capacidad física es tan imponente como la de cualquier otro pedalista en el WorldTour. Su decisión está tomada, no va más, pero sigue siendo un amante de la bicicleta, de las rodadas.
Así que, una vez en Colombia, no se iba a quedar con las ganas de subir el Alto del Vino. Este puerto que fue la referencia de todo el Tour Colombia, la jornada reina, el día más esperado, es bastante duro, pero lo suficiente como para seducir a los que se prueban sobrela bicicleta.
A los participantes les tocaba subirlo, pero suele ser un puerto visitado el resto de días por aficionados, así que Alejandro quería probar esos 2800 metros de altura en donde termina el puerto… como lo hizo el mismo día que se dio la etapa reina, la gente pudo verlo y sí, enloqueció: