El peor día de Egan sobre la bicicleta casi le cuesta el Tour de Francia 2019. El joven líder del Team Ineos ha pasado por momentos complicados, como la mayoría de deportistas a lo largo de su carrera, siendo estos muchas veces los que determinan el carácter para encarar los retos.
Las caídas para los ciclistas estan a la orden del día; por supuesto en cualquier momento, sea de entrenamiento o en competencia, no están exentos; Egan no ha sido la excepción, él también tuvo su momento difícil durante la edición 98° de la Volta a Catalunya.
Allí, Egan, durante la última jornada, a 6 km de meta, venía por detrás de José Joaquín Rojas del Movistar Team, quien cayó al resbalársele su bicicleta, obligando de paso al colombiano a frenar y tropezarse con el español; como resultado del accidente, Bernal tuvo ruptura de clavícula y algunas lesiones menos.
Pero bueno, si de caídas fuertes se trata, Egan también vivió una en la Clásica de San Sebastián en donde se vio afectado su rostro, perdiendo algunos dientes y fracturándose la mandíbula y el tabique, situación que lo alejó de correr la Vuelta España en 2018. Sin Embargo…
El día en que Egan casi pierde el Tour de Francia 2019
El día que Egan casi pierde el Tour de Francia 2019, no fue precisamente por una caída, pero el sufrimiento igualmente fue el protagonista; justo cuando corría la etapa 13 de la ronda francesa, una contrarreloj de 27,2 km en Pau.
En dicha etapa el colombiano partía, aún sin dar muchos visos de lo que pudiese pasar al final de la carrera; Egan confesó que fue uno de los días en que más sufrió sobre la bicicleta;«Sentía las piernas pesadas; era la segunda semana del Tour, pero no quería pensar eso porque a veces los días que uno se siente peor le va mejor».
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La situación en un principio fue así en palabras de Bernal: «En el momento que arranqué pude moverme en los vatios que me pedía el equipo, pero pues sólo era el kilómetro uno; luego vi que estos se bajaban cada vez más y desde el carro me animaban«; sin embargo, él joven corredor dijo «yo creía que lo estaba haciendo muy mal; ellos me decía que fuera de menos a más, pero pensaban que yo me estaba regulando, pero la verdad es que yo estaba muerto».
Bernal, finalmente relató cómo por su cabeza se le pasó parar «En ese momento pensé en parar, porque creía que estaba perdiendo mucho tiempo y que casi; lo mejor era seguir suave y perder lo menos posible, para ayudar el siguiente día a mi compañero de equipo. Yo estaba a punto de parar, hasta que me dijeron que sólo estaba perdiendo como 35 segundos».
El deporte en su máximo nivel siempre será un lugar desapacible para los deportistas, aunque no lo muestren en muchas ocasiones y Egan lo vivió ese día; concluyó: «Tuve que exigirme mentalmente y físicamente hasta el punto de pensar en que esto no era chévere y que al estar tan cansado prefería parar, pero menos mal no paré».