Rigo Urán revela una triste realidad, por la que pasan los jóvenes ciclistas colombianos y que termina siendo la piedra angular de su poco rendimiento en Europa, cosa que hoy se ve y que es la constante, el tema pasa por aspectos económicos.
El corredor de Urrao analiza muy bien lo que sucede con el ciclismo colombiano, pero revela que hay muchos líos juntos, que no se trata de un par de cosas y ya. El de Urrao habló directo y se refirió a un aspecto que preocupa y mucho, el hambre.
En una entrevista, Urán aseguró que en Europa los procesos son totalmente completos, acompañando al joven ciclista en cada proceso, en cada detalle, desde la manera de correr, posicionarse y demás, como en la alimentación, cosa que no hay acá… ni de cerca.
“A mí me preguntan cada ratico que qué pasa con el ciclismo colombiano y pasan muchas cosas. En Europa, obviamente, hay formas diferentes, hay un poquito más de billete, la gente está mejor, esa es la realidad, no se aguanta tanta hambre como en Colombia”.
“Nosotros aquí en Colombia tenemos muchos niños que realmente no reciben las tres comidas al día. Es muy difícil exigirle a un niño con hambre. Hoy en día en Europa las técnicas de entrenar han evolucionado mucho, los entrenadores, las bicicletas, los medidores de potencia, las vitaminas, la recuperación que se hace, pues eso tiene un costo muy elevado y, obviamente, pues uno no puede decirle a un niño que tenga todas estas cosas cuando en su casa no hay para comer”
“Imagine: a mí en el año 2001 me decían que había que suplementar. Yo suplementaba con fríjoles, arroz y chicharrón, no tenía, no había para otras cosas. Hoy en día vemos los nutricionistas, los dietistas de los niños. Allá en Europa a los 18 años ya están listos para ganar el Tour de Francia”, dijo a Revista Semana.