Nairo Quintana siempre se ha caracterizado por ser una persona con grandes cualidades humanas. Entre todas ellas, hay una que destaca y que el colombiano atesora con gran aprecio y es la humildad. Nuevamente Nairo hace gala de la humildad con los suyos.
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El mejor escalador del mundo entrena en Boyacá. Se le ve en la carretera pedaleando en medio de los paisajes boyacenses que le ponen el lado estético a su entrenamiento rumbo al Tour de Francia y en medio de estos paisajes, los campesinos recogen y trabajan sus cosechas, tal como su padre Jairo Quintana y él en su momento hacían.
Por esa razón es que su afinidad con ellos es esencial y su manera de defender y apoyar el campo lo han convertido en un embajador de los buenos valores de los campesinos. Uno de esos campesinos se ha detenido para ofrecerle guarapo, bebido tradicional de Boyacá y el de Combita se ha detenido para recibir la bebida, compartir con los suyos y agradecer:
Por esta razón es que Nairo Quintana es muy querido en Colombia, por detenerse y compartir con los suyos, sin olvidarse de donde viene y apoyando las tierras donde nació.