Egan Bernal iría al Tour de Francia 2018, es decir, en poco más de un mes estaría junto a Rigoberto, Nairo, Froome y Gaviria… pero insisto en esta palabra ‘iría’, porque no es confirmado; fue su agente quien lo dijo y no el Team Sky, quien tiene la última palabra y hasta que no aparezca su nombre en la plantilla oficial, que saldría en un mes también… pero supongamos que sí va a ir.
Ver correr a Egan recuerda los años maravillosos de genios del pedal, que se paran en pedales y conquistan montañas una y otra vez es algo, más que increíble, adictivo. Entonces, ya veo a mucha gente sentada, frente al televisor, sintonizando las transmisiones donde correrá Bernal, así como pasaría con cualquier otro escarabajo colombiano, pero con un condimento especial: espectáculo.
Cada vez que Bernal corre en una alta montaña, algo debe pasar con él: o gana o estuvo muy cerca de conseguirlo. Pero dada su reciente actuación en el Tour de California, parece que el de Zipaquirá abrió una puerta muy importante y el mundo lo supo: campeón… campeón de alguna grande en un futuro.
Esta proclama será una constante… proclama que por lo demás tiene 3 palabras mágicas: Tour de Francia. Y sí, dijeron que Egan va para el Tour, cosa que es genial, un motivo más para ver esta carrera. ¿Qué se espera? Hay que decirlo de frente, será gregario de Froome y seguramente tomaría el relevo de Sergio Luis Henao en el Sky… Insisto, solo durante este Tour de Francia.
Pero hay riesgos en esa decisión, de llegar a ser verdad su convocatoria, a pesar de lo bonito que puede ser un espectáculo con él.
1.
La premura al convocarlo para una grande, puede sobrecargar al colombiano, luego de exigirse en otras carreras World Tour. Podrían argumentar su gran forma, pero es preferible que tenga una formación paulatina, que se adapte a sus necesidades, que empezar a surcar unos terrenos que merecen otro tipo de preparación, de resistencia. 3 semanas para Egan, con 21 años, es un gran riesgo.
2.
El Team Sky ve en el colombiano lo que todos ven, un tesoro. Pero ese tesoro no se puede acabar en 3 años. Quemar al colombiano rápidamente sería una oportunidad (una gran oportunidad) desperdiciada, exigirlo tan rápidamente. Este punto se relaciona un poco con el primero, pero acá se habla de un portentoso proyecto a largo plazo. Desgastarlo no sería un buen camino.
3.
Sabemos de la madurez de Egan. Para tener 21 años, ha asumido su talento de una manera superlativa… ¿Y si la falta de experiencia, por más arropado que esté por Froome, lo forja a hacer un papel que él, tal vez, no prevé? La situación psicológica que trae una grande no es cualquier cosa. Hemos visto cómo grandes (por citar solo a uno, Arú, en este presente Giro), caen ante la exigencia de la carretera y en su posición de gregario, aunque Egan no irá por la general, sí tendrá algunas ambiciones… es natural de él.
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Desplomarse psicológicamente es igual o más importante que hacerlo físicamente, por lo que creería que, con un poco más de preparación mental y física, Egan podría llegar muy bien a una grande y de hecho, tener posibilidades, pero tan pronto, me parece un riesgo.
Hay que decir que como riesgo, tiene sus pro y sus contras y si, de casualidad llega a ir, claramente espero que esos puntos mencionados no pasen y tenga un papel superlativo… por algo, es el campeón del futuro y ese futuro es ahora.
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